Entrevista con: Diego M.B. Domínguez. La última misión.

El tiempo. ¿Qué es el tiempo?  El tiempo es una magnitud física con la que se mide la duración o separación de acontecimientos.

Os estaréis preguntando el porqué de mi pregunta. Pues créanme queridos lectores que tiene mucho que ver con nuestro siguiente autor y su primer libro publicado: “La última misión”.

Hoy, me apetece que leáis la sinopsis antes de comenzar la entrevista. Preparaos porque hoy os traigo un libro que merece la pena leer.

Tras toda una vida dedicada a una misteriosa agencia encargada de velar por la restauración de la línea temporal, Nico recibe un encargo secreto por parte del Director que puede suponer la solución definitiva a todo. Debe viajar al pasado, apenas unos meses antes de que comiencen a producirse las primeras cicatrices, para seguir de cerca a un objetivo que puede cambiar la situación. Pronto se percata de que no tiene margen de error, puesto que cumplir con éxito con esta misión puede permitirle alcanzar aquello que siempre ha deseado: tener, de una vez por todas, una vida normal. Es así como acaba conociendo a Cristina, comenzando a experimentar por primera vez en su carrera al servicio de la institución dudas, a medida que profundiza en su relación personal con ella. Por más que la observa y que conversa con esta mujer, no termina de comprender la razón de ser de la misión ni por qué ella es considerada como uno de los objetivos por parte del Director y de la agencia.

¿Os gustó, verdad?

Ahora sí estáis preparados para la siguiente entrevista.

Comenzamos.

María: Hola Diego. Me gustaría que te presentases para que el lector conozca al escritor.

Diego M. B. Domínguez: Hola María. En primer lugar, me gustaría darte las gracias por la oportunidad que me das con esta entrevista y también, felicitarte por tu trabajo. Me parece que haces una labor de difusión muy importante para ayudarnos a los autores a darnos a conocer un poco más.

En lo que a mí respecta, teniendo en cuenta el tópico de que siempre resulta algo complicado hablar de uno mismo, comentar que desde el año 2008 me he dedicado principalmente al mundo del periodismo deportivo: tanto en medios digitales como audiovisuales. Más allá de eso, si algo me ha apasionado desde siempre ha sido la escritura y el hacerles llegar a los demás historias. Y bueno, este año he acabado cumpliendo un sueño que tenía desde siempre, como era el de escribir y publicar una novela.

María: Recomiéndanos un libro o un autor y dinos porqué lo elegiste.

Diego M. B. Domínguez: Se trata de una pregunta bastante complicada, porque hay una gran variedad de autores que me han acabado marcando como lector: Arturo Pérez-Reverte, Eduardo Mendoza, Juan Eslava Galán, Javier Cercas, Terry Pratchett, Michael Ende, Aldous Huxley, Robert Graves…

Quizás, teniendo en cuenta que a nivel literario siempre me ha apasionado todo lo que tuviera que ver con la historia, podría recomendar tanto “Una historia de la Guerra Civil que no va a gustar a nadie” (Juan Eslava Galán) y “Anatomía de un instante” (Javier Cercas). Son dos obras que me gusta releer cada cierto tiempo y con las que siempre acabo descubriendo nuevos detalles sobre los hechos que tratan.

“La última misión, la última tarea, el último encargo… En definitiva, el último sacrificio antes de poder tener aquello a lo que siempre había aspirado: el tener una vida medianamente normal. Por ello, quizás, estaba más nervioso que en otras ocasiones a la hora de dar el primero de los pasos de este trabajo. Tenía que salir todo a la perfección, sin errores. El más mínimo error podría comprometerlo todo, impidiendo que el final que tanto anhelaba se materializara”.

Diego M.B. Domínguez. La última misión.

María: “La última misión” es tu primera novela publicada. ¿Es una única novela, o pertenece a una serie, bilogía, trilogía, saga…?

Diego M. B. Domínguez: Sí, “La última misión” es la primera novela que publico. Mi intención cuando la escribí era la de que fuera una novela autoconclusiva, aunque dejando la puerta abierta a la posibilidad de enlazarla con otros proyectos que pudiera escribir en un futuro. La idea no sería tanto la de hacer una continuación, sino la de redactar más historias independientes en las que hubiera pequeños puntos de conexión entre ellas.

María: ¿Qué historia hay dentro de las páginas de esta novela?

Diego M. B. Domínguez: El punto de partida de “La última misión” son los viajes en el tiempo, como consecuencia de la aparición de unas anomalías temporales (que denomino en la novela como cicatrices) que han provocado el caos absoluto. Hasta el punto de que la línea temporal ha acabado quedando completamente destruida y, con ella, la vida tal y como la conocían los personajes. Poco se sabe de estas cicatrices, más que su origen parece encontrarse en una organización oculta y desconocida.

Luchando contra esta organización, peleando por conseguir la restauración de la línea temporal para que todo sea como antes, se encuentra una institución a la que pertenece el protagonista de la novela: Nico. Él acaba recibiendo un encargo por parte del director de su agencia que, si sale según lo previsto, permitirá la consecución del objetivo deseado por todos.

La novela se centra en el viaje (tanto a nivel temporal como a nivel personal) que realiza el protagonista para tratar de cumplir con esa misión tan trascendental.

“Tras ese sobresalto inicial le pareció notar algo en el ambiente. Algo especial, algo diferente… Algo que había estado esperando toda la vida, sin terminar de saber exactamente de qué se trataba. Notó un cosquilleo en su interior y, de pronto, lo oyó: un sonido como el de una tela desgarrándose. Y ante él, a los pies de la cama, apareció: primero, una chispa azulada, que revoloteaba indisimuladamente; luego, la chispa fue creciendo, hasta convertirse en una especie de cicatriz brumosa y que flotaba ante él”.

Diego M.B. Domínguez. La última misión.

María: Siempre pregunto por los personajes. Así que también te lo preguntaré a ti. ¿Nos hablas de ellos?

Diego M. B. Domínguez: El protagonista de “La última misión” es Nico, el agente más exitoso de la institución que trata de conseguir la restauración de la línea temporal. Si por algo se ha caracterizado ha sido por ser una persona muy enfocada en la misión, muy centrada en la consecución de los resultados… Es por eso por lo que acaba recibiendo el encargo que puede marcar un antes y un después en esta lucha a través del tiempo para lograr que todo vuelva a ser como antes de la aparición de las anomalías.

Sin embargo, es a raíz de esta misión cuando todo en lo que había creído hasta entonces comienza a tambalearse. La causante de esto es el objetivo que debe vigilar, Cristina. Se trata de una mujer bastante normal, que no parece demasiado sospechosa. Y, como consecuencia de ello, Nico termina dudando de diversos aspectos en los que nunca había reparado.

María: ¿A qué público crees que va dirigido tu libro?

Diego M. B. Domínguez: Es curioso, porque mientras estaba escribiendo la novela tenía una idea muy definida del posible destinatario final. Y, lo que la experiencia de estos meses me ha acabado demostrando es que esa imagen que tenía no ha tenido una correspondencia plena. Me ha sorprendido bastante comprobar que a personas con unos gustos diferentes a los que tenía pensados en un inicio les ha acabado gustando bastante mi propuesta.

Te podría decir que “La última misión” puede ir dirigida a los amantes de la ciencia-ficción o del misterio… Pero, en base a lo que he vivido, me parece más adecuado abrir el abanico a todo aquel lector que esté dispuesto a disfrutar de una historia diferente.

“El encuentro no hizo más que refrendar (cuando no, mejorar) las impresiones que aquella mujer le había dejado a nivel personal. Así pues, solamente cabían dos alternativas: o bien Cristina era una mujer normal y corriente, sin conexión de ninguna clase y se había cometido un error en su designación como objetivo, o bien Cristina era una mujer especialmente astuta y cautelosa, con un autocontrol y una inteligencia de tal magnitud que había sido capaz de engañarle por completo”.

Diego M.B. Domínguez. La última misión.

María: Antes como lector veías este mundo desde fuera. Ahora que estás dentro, ¿qué te parece?

Diego M. B. Domínguez: La verdad es que me parece que es un mundo apasionante, que me está permitiendo ver las cosas desde otra perspectiva a la que estaba habituado. No tenía mucha idea de cómo funcionaba todo esto cuando me aventuré a publicar “La última misión”… Tampoco tenía unas expectativas demasiado definidas. Teniendo en cuenta esto, no he parado de llevarme sorpresas bastante agradables.

Estoy teniendo la posibilidad de aprender muchísimo, tanto de lo bueno como de lo menos bueno: al final, creo que todo suma y ayuda a continuar creciendo. Lo que llevo viviendo estos meses me está resultando muy atractivo y enriquecedor. Sobre todo, a nivel humano gracias al cariño y a la generosidad tanto de los compañeros escritores como de los lectores que he podido conocer.

María: Y una última pregunta. ¿Dentro de que género literario situarías tu libro?

Diego M. B. Domínguez: Bueno, te diría que teniendo en cuenta el punto de partida de la novela, con todo lo relacionado con los viajes en el tiempo y la necesidad de restaurar la línea temporal, podría encuadrarse dentro de la ciencia-ficción. Sin embargo, uno de los aspectos en los que más me centré mientras estuve escribiendo el libro fue en tratar de tomar elementos de otro tipo de narrativas para enriquecer la historia. Es posible encontrarse toques románticos, de intriga, de misterio…

María: Este espacio es para ti. ¿Deseas contarle algo más al lector?

Diego M. B. Domínguez: Quisiera aprovechar este espacio para dar las gracias a todos aquellos lectores que han decidido darme la oportunidad y leer “La última misión”. Y, a aquellos que aún no lo han hecho, invitarlos a hacerlo con los brazos abiertos, con el deseo de que disfruten de mi novela tanto como yo hice en su momento cuando la escribí.

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